Aprendiendo a Querer con el Alma

lunes 15 de marzo de 2010

CUATRO AÑOS SIN TI AINHOA

Mañana es 16 de Marzo, un día para nosotros inolvidable, Ainhoa falleció este día del año 2006 a la misma hora que nació, a la seis y veinte de la tarde.
No puedo decir que he superado la muerte de mi hija, no lo haré nunca, solo estoy aprendiendo a vivir con ello, con muchos días malos, pues nuestras vidas nunca serán las mismas, siempre está esa gran cicatriz que duele y duele profundamente, en el alma.
En estos cuatros años sin mi hija mayor Ainhoa, he aprendido a quererla con el alma, y con locura, cada día más, y he aprendido a valorar lo que la vida te da, a saber qué cosas son las importantes y que no, lo material, es solo eso, material, pero el dar amor, cariño, amistad y saber estar es para mí un balance que en estos cuatro años he aprendido a valorar más, puesto que mi hija Ainhoa ha sido mi maestra en estos valores y eso que como bien sabéis tenía solo cinco añitos cuando falleció.
Decirte mi niña grande, que últimamente te veo en las fotos de casa y siento que me miras e incluso te ries, como diciéndome que estas bien, feliz y que no te duele nada, que estas agustito y será quizás locura de mami, pero en mi siento una voz que me dice voy a volver, voy a volver, y sé que eso es imposible, porque la vida nos podrá dar o no dar mas hijos pero tú eres única, no volveras, Ainhoa es Ainhoa, eres irremplazable.
Ahora con Carla este 16 de Marzo es igual pero distinto, ya que es un puro bicho, de nervios y genio, “como su mami”, es el polo opuesto a Ainhoa. Carla es totalmente “cañera"
El querer con el alma me ha hecho ser un poco mas expresiva con mis sentimientos, quizás los refleje más, vivo más cada momento, disfruto de todo día a día.
El amor de padres rebasa todas las fronteras y todas las pruebas, tanto buenas como malas, el amor por Ainhoa no murió ni morirá, será cada día más grande en nosotros, pero claro de otra manera que con Carla.
Para querer a una persona no hace falta tenerla presente, se quiere con el corazón, con el alma y si los tenemos siempre presentes siempre vivirán en nosotros, en nuestros corazones y mentes, por ahora ahí le ganó la batalla a la muerte; palabra que me duele mucho, porque para mi hija Ainhoa no está muerta, vive en mi, de otra manera que Carla, cada hija mía vive de una manera, igual que cada una tiene un carácter distinto.

Solo espero algún día volver a ver tus ojos, tu cara y poderte decir:
VES HIJA, MAMÁ SIEMPRE HA ESTADO CONTIGO, NUNCA TE DEJE, SIEMPRE HE ESTADO CONTIGO, TE QUIERO AINHOA, SIEMPRE JUNTITAS, UN BESO HASTA EL CIELO.
P.D.: El bichín de Carla nos tiene locos, nos devolvió las ganas de vivir donde pensábamos que ya no había vida, que no había sentido por seguir viviendo.
Tras el fallecimiento de un hijo renaces de las cenizas y con Carla a nuestro lado es diferente, por ella todo, tragamos lo que haga falta, ella se merece todo, unos padres al 100% y todo el cariño del mundo.

Loly ,mamá de Ainhoa y Carla